Entradas

Mostrando entradas de junio, 2020

La ultima cita con Rosita.

Imagen
Cuando era un niño la televisión cubana transmitía un programa musical unipersonal cuya protagonista era una hermosa mujer rubia, con cuerpo de sirena, a la que todos llamaban Rosita Fornés.   La descubría una vez por semana, sentado en las piernas de mi tío, quien tenia el lujo y el privilegio de trabajar con ella  en varias ocasiones. Cada emisión era un regalo para mi. Aquella mujer me transmitía una alegría inusitada, su forma de moverse, de expresarse, de hablarnos a los que estábamos sentados en nuestras salas. Era como una diosa. El programa se llamaba " Cita con Rosita". Con el tiempo supe del debate nacional que hubo siempre con respecto a su edad, porque había comenzado muy temprano, con solo quince anos, en un programa de la época capitalista que descubría talentos: La corte Suprema del Arte. Para mi, ella tenía siempre la misma edad, era imperecedera, inamovible, porque hacía cualquier cosa, actuaba, cantaba, bailaba, y lo hacía como la primera vez.  En mis